lunes, 17 de febrero de 2014

UNOS ZORROS LOCOS, LOCOS, LOCOS Y
UNAS GALLINAS EN TANGAS.



Es lo que nos encontraremos en las noches de Madrid si salimos a los lugares de ambiente.
Si tengo que elegir me quedo con los primeros, las otras son mas peligrosas que meter una piraña en un bidé, mientras intentas lavarte el choco.
Son terriblemente deliciosos, vaporosos, con una feminidad que raya en la perfección y que hagan lo que hagan las de la otra especie jamas la podrán igualar. Como se mueven, con que delicadeza, elegancia nos tratan, que buenos están, que mas da lo que les guste comer, solo con el echo de verlos te alegran la vida.
Ya estoy aquí, me hacia pis.
Solo otro hombre ungido por una sobredosis de sensualidad y amante de su condición y aceptación de la parte de feminidad que le asignaron, fue capaz con su cincel de crear a DAVID.
No hay nada mas perfecto que el cuerpo del hombre, creado para deleite y disfrute de solo algunos privilegiados que saben ver y  apreciar tan maravillosa obra.
Es en ese instante cuando sin dudarlo y por un instante creo en DIOS.
Lo de las gallinas locas, esa ya es otra historia, mas bien una de esas historias interminables.
Cebos envenenados enganchados al final de una larga e invisible caña, la cual saben muy sutilmente echar,y que una vez ojeada la pieza que quieran pescar, desplegaran todas sus plumas de pavas reales para asfixiarles poco a poco y que les deje de llegar el oxigeno al cerebro y poderles manejar a su antojo.
Nunca digáis ¡¡¡ Si quiero!!! la cagareis irremediablemente, todas llevan un kit de supervivencia!!! LA MADRE!!! no se os olvide.
Siempre me dijeron mis amigos que los casados son los que menos follan, es verdad, después de un impecable estudio de campo, he comprobado que es cierto.
Me gustan los zorros locos por que huelen muy bien incluso habiendo estado toda una noche bebiendo y fumando con lo que ello conlleva. Todo eso mezclado con millones de feromonas hace que cualquiera que se cruce con ellos se mate por patentar el sudor que desprenden y tenerlo para su particular uso y disfrute.
Animales con rango de reyes, majestuosos en cada movimiento que hacen, muy desaprovechados, aunque francamente los que rayan la perfección deberían de ser considerados patrimonio de la humanidad.
A TODOS LOS CHANELES NUMERO 10.
GRACIAS POR EXISTIR.





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