EL SILENCIO NO CAMBIARA EL MUNDO

Nuestra libertad, "vuestra tumba".

Porque no todos somos hijos ni de ese tal dios ni de nadie.

Porque después de que desapareciste me quede vagando, perdida, sin refugio, buscándote a través de una niebla de cristal en la tormenta de los tiempos, sola como un velero sin timón, sin timón pero ¡LIBRE!, libre para continuar investigando tu ausencia, y escribo porque me ayuda a sentirme despejada, pero cuando agotada interrumpo mi relato, desconsolada vuelvo a salvaguardar los inmensos sentimientos que mi alma conserva de ti....

EN EL CAJÓN DE MI GAVETA