DEBAJO DE LA CAPA DE LUIS CANDELAS
COEXISTEN LA CONTUNDENCIA Y LA RAPIDEZ
Querida hermana Carmen:
Vuelvo a escribirte para contarte que tu sobrina Angelica y yo tu hermana "PEPI"como te gusta llamarme y que nunca te ha olvidado, hemos estado en la comisaria de Ciudad Lineal de Madrid donde sabes como ya te he contado ibamos a ir para poder continuar sobreviviendo, ya que vivir me es mas duro cada dia sin saber que ha sido o es de ti.
Querida hermana Carmen:
La mañana del dia 9 de Noviembre era muy pero que muy fria, aun asi me levante contenta, esperanzada, sin fuerzas como ya sabes debido a mi enfermedad, y comence a como se suele decir "arreglarme" para esperar junto al portal a la hija y me acompañase para poner una nueva denuncia y de esa manera "volver a empezar", como el titulo de la oscarizada pelicula del mismo titulo.
Paramos a un bar del barrio de Manuel Becerra llamado "entre Caceres y Badajoz" porque me estaba haciendo "pis", para los de la logse"meando", y Angelica aprovecho para desayunar que aunque nada me habia dicho yo sabia que andaba con mas hambre que el perro de un ciego como se suele decir.
Una vez terminamos de dichos menesteres, fuimos derechas al coche que no te lo he dicho pero aunque yo tambien tengo carnet de conducir "no lo hago", pero la niña ni te imaginas lo bien que lo meneja, en fin...
Estabamos llegando a la comisaria de esa zona ya que nos derivaron hasta alli porque la comisaria de Principe de Asturias que es la que nos corresponde continua en obras, y a la vez buscando sitio donde aparcar, "por fin un sitio", o un ¡sitiazo!..
¡Mira, un hueco!
Mama, es pequeño
¡Que no, que cabe hasta un camion!
¿Un camion?
Vale
¡Y aparco!
¡Lo ves, cabia!
¡Eres muy buena!
Nada mas salir del coche mi hija me acerco su brazo para que como suelen decir los castizos "se lo enhebrase", y asi lo hice.
¡Mama, agarrate a mi!
¡Hija, que no estoy tan mayor!
Lo se, pero me dijo mientras se sonreia ¡hay muchas escaleras que bajar!
Es verdad, demasiadas escaleras.
Ya nos encontrabamos cerca de la comisaria porque podia ver los coches cerca de las aceras, unos aparcados y otros imagino dirigiendose a un o varios servicios.
Entramos cogidas del brazo y alli estaban el agente Samuel y el agente David, que nada mas vernos ¡ Samuel nos reconocio!
¡Hola!
¡Hola, contestamos!
¡Hija!
¡Que, mama!
¡Nos ha reconocido! le dije.
¡Si, lo se mama!
Primero atendieron a un muchacho que habia perdio el carnet de identidad o eso decia y luego Samuel nos pidio los nuestros para seguir el protocolo e identificarnos.
¿Diganme que puedo hacer por ustedes?
Venimos a poner una denuncia por "desaparicion"
No nos pregunto nada mas, tomo nota de nuestros carnets y nos los devolvio.
Pueden pasar a la sala....
¿Dejamos los bolsos y demas pertenencias en el escaner?
A lo que respondio...
No hace falta, las conocemos porque hay personas y personas.
Le di las gracias, entramos en la sala de espera, y tranquilas nos pusimos a hablar, a recordar, a compartir un momento en el que una vez mas ¡no estaba sola!, estaba mi hija y mi policia, porque aveces ser fuerte significa pedir ayuda, ese dia volvi a pedirla.
Salio un agente y pronuncio mi nombre, y le conteste ¡soy yo!
Pase señora por favor.
Sientense si son tan amables en esas sillas de esa mesa, ahora las atiendo.
¡Gracias!
Asi lo hicimos, y apenas en unos segundos vino el agente y nuevamente nos pregunto,
¿Diganme?
Di comienzo a mi relato y segun iban pasando los minutos me fui emocionando teniendo que continuar Angelica que mas calmada le explico todo.
¿Como se llama? le pregunte a quien tanta atencion nos estaba prestando.
Dudo en decirme su nombre pero al final me dijo el agente "mi nombre es Gregorio".
Bonito nombre respondi y sonrio.
Hicimos la denuncia esta vez con nuevos datos, con nuevos informes, pero estaba tan agusto, tan humanamente tratada, ¡tan bien! que no me di cuenta que habia mas gente, mas gente con problemas, mas gente que les necesitaba y uno de los policias se acerco a la mesa y le dijo a Gregorio ¡mi policia! "que le necesitaba"...
¡Lo siento, lo siento, lo siento mucho! no podia parar decir ¡lo siento!....
No pasa nada señora, tranquila.
Volvi a repetir ¡lo siento!
¡Mama!
¡Que!
¡Firma, mama la denuncia!
¡Ah, si!
¡La has leido bien hija mia!
¡Si, mama!
¡Firma ya por favor!
¡Ya voy!
Y...¡Firme sin repasarla!, pero ¿para que?, la habia leido mi hija y escrito un agente que lo primero que nos manifesto es que era psicologo, a lo que Angelica le dijo que ella era licenciada en pedagogia el cual transcribio lo que le fuimos relatando y con eso me bastaba.
Me di cuenta lo pesada que puedo llegar a ser, pesada por no decir latosa, pero frente a mi estaba Gregorio armado de todo su amor, comprension y paciencia.
Me puse el abrigo blanco que llevaba, los guantes, el bolso,y me aferre a la denuncia, y vi como Gregorio se levantaba de su asiento para despedirnos y acompañarnos hasta la puerta.
Extendio su mano para coger la mia, no le deje, pero si le abrace como si no hubiese un mañana por ¡TODO! y digo bien ¡TODO! lo que hizo por nosotras "AUNQUE ESE FUESE SU TRABAJO", el me devolvio otro bien fuerte que me hizo sentir "PAZ Y SEGURIDAD".
Antes de marcharnos, me acerque a la mesa del otro pobre agente que pacientemente tambien indirectamente habia aguantado con resignacion "todo", y le roge me disculpase.
Le suplico me perdone agente le dije
Tranquila señora, es que tenemos mucho trabajo y necesito a mi compañero.
Le entiendo.
No he sido consciente de la lata que estaba dando
¿Me perdona?
Tranquila señora, volvio a repetir.
¡Adios y gracias por todo!
¡Suerte! oi...
¡Gracias! respondi..
¡Adios,Gregorio!
¡Adios señora!.
A la salida continuaban en su puesto Samuel y David.
A David no le conocia, pero a Samuel si (que por su edad podia ser hijo mio) y por eso me despedi de el dandole dos besos, y recordandole que cuando viese a Alberto "otro de los agentes"perteneciente a la comisaria de Principe de Asturias", que fue trasladado a esta otra de Ciudad Lineal por que la otra se encuentra en obras como ya te he dicho, le diera muchos recuerdos de mi parte.
¡A si lo hare, señora!
Les he prometido volver en Navidad para felicitarles.
Salimos mi hija Angelica y yo de las dependencias policiales, hacia frio.
Volvi a enhebrar mi brazo en el suyo para esta vez subir que no bajar las dichosas escaleras que nos llevaban hasta donde estaba el coche estacionado.
Una vez dentro de el Angelica ha llamado a D. Joaquin Amills de S.O.S., le ha explicado todo y se han pasado los correos electronicos para estar en contacto y escanearle los documentos, tanto los del juzgado como las nuevas pruebas que obran en mi poder.
¿Te he dicho que fuma?
¡Si, tu sobrina Angelica!
Encendio un pitillo.
¡Si vas a fumar abre las ventanillas, que luego me huele a humo hasta la ropa interior!
Llegamos a casa, ¡MI CASA, TU CASA! que te esta esperando, me dejo frente al portal, nos besamos, nos dijimos una y un millón de veces ¡TE QUIERO! y la vi alejarse.
Querida, amada, y jamas olvidada hermana Carmen, ¡YA HA DADO LA ALERTA! S.O.S. DESAPARECIDOS, Don Joaquin Amills me ha estado llamando todo el dia para pedirme algun que otro dato tuyo y para darme animos, y como debes de imaginar tambien he estado llorando todo el dia, como lo llevo haciendo treinta y cinco años.
Querida, amada y jamas olvidada hermana Carmen:
No nos dieron la oportunidad de estar juntas, nos separaron de un hachazo y nos tiraron como desperdicios a este gran contenedor basuras llamado "mundo", pero nunca imaginaron estos dos "monstruos"que una de las dos sobreviviese para recordarles "LO QUE HICIERON ESE ULTIMO VERANO".
Porque ha llegado la hora de que "LA PEPI", les diga la verdad con la mano que se jura, porque donde no hay amor no hay pasado, porque de mis actos respondo del primero al ultimo, porque no voy a dejar de ser yo hasta el final, porque el final para algunos empieza hoy, porque sabes que tu hermana "PEPI" no es de las que empiezan los combates tirando la toalla, porque nunca voy a dejar de celebrar para desgracia de algunos de ser una superviviente, porque ser hermana significa estar ahí...
¡PORQUE NADIE PUEDE PARAR QUE TE AME!
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