LAS VACAS NO DAN LECHE HAY QUE ORDEÑARLAS
He visto luz y he llamado a la puerta, a la puerta de una pequeña cabaña medio escondida en el bosque la cual me hizo recordar el cuento de Hansel y Gretel que de pequeño me contaban.
Pasados unos minutos una voz entrecortada me hizo saber que no solo estaba habitada, sino que quien en ella se encontraba deduje era una anciana mujer por como se iba acercando a la puerta arrastrando sus pies lentamente.
¿ Quién es?
A lo que le conteste con voz grave, soy un caballero que se ha perdido en esta floresta y no sabe como salir de ella, ¿ seria tan amable de indicarme el camino de regreso a mi aldea?
Un momento por favor voy a ponerme una bata.
No me equivocaba, en efecto cuando me abrió la puerta pude comprobar que efectivamente una adorable abuelita era la persona que vivia en ella.
Buenas tardes señora.
Buenas tardes caballero.
Vera señor a su pregunta he de decirle que llevo tanto tiempo sin salir de aquí que no sabría indicarle como llegar a su aldea.
Bueno no pasa nada tranquila ya me las apañare.
¿ Me daria usted si es tan amable un poco de agua, vengo de lejos y mi garganta esta seca ?
Espere un momento, ahora le traigo un vaso, pero pase, pase no se quede ahí de pie y siéntese a descansar mientras se lo bebe.
Gracias señora le conteste, es usted muy agradable, no sabe cuanto se lo agradezco porque no he parado de andar de un lado para otro y estoy muy cansado.
Tenga señor beba tranquilo y cuénteme un poco de como le va la vida , ¿ es usted feliz?, ¿ esta casado?, ¿tiene hijos?, pensara que soy una curiosa, nada mas lejos, es que hace tanto tiempo que no hablo con nadie.
No señora la conteste, para nada es usted curiosa, le cuento, feliz lo que se dice feliz mas o menos pues si, no estoy casado y si tener tengo un hijo de 6 años.
Pasaron las horas y el vaso de agua se convirtió en uno de leche con galletas, hasta que llego el momento de despedirnos.
Muchísimas gracias es usted un encanto de señora, aunque aun no me ha dicho su nombre y yo tampoco me he presentado.
Me llamo Maria
Yo Pablo
Encantada Doña Maria
Igualmente Don Pablo, espero encuentre el camino de regreso y pueda pronto abrazar a su hijito.
Muchas gracias, y cuidese mucho Doña Maria.
¿ Le puedo pedir un favor antes de irse Don Pablo?
Como no, pues claro que si lo que necesite.
¿ Me puede traer este cántaro lleno de leche del pequeño establo que hay frente a la casa, es que se me ha terminado?
¿Y de donde la saco? pregunto Don Pablo, a lo que Doña Maria le respondió, pues de donde va a ser de una vaca.
¿ Tengo que ordeñarla?
Si
No se hacerlo
Aprenda entonces por mi por favor.
Muy bien le traeré el cántaro a rebosar prometido.
Después de varias horas llego Don Pablo con el cántaro vacío, y con la cabeza agachada avergonzado le dijo a Doña Maria que lo había intentado pero que le había sido imposible, a lo que Doña Maria risueña le contesto, vera Don Pablo...
LAS VACAS NO DAN LECHE HAY QUE ORDEÑARLAS.
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