jueves, 23 de septiembre de 2021

ANGELICA 36

 Ningun  lenguaje puede expresar, el poder, la belleza, el heroismo y la majestuosidad del amor de una madre.

Soy Angelica Albor Fraile , hija de Josefa y sobrina de Carmen, despues de 36 años tengo la oportunidad de expresar en un breve pero intenso espacio de tiempo algo verdaderamente complejo, el dolor extremo y limite al que se ha visto sometida mi madre desde su nacimiento, ya recibiendo patadas en la barriga de su madre por parte de su padre hasta el dia de hoy,  teniendo que asumir la desaparicion de su hermana Carmen, asesinada en 1981, recibiendo un golpe en la mandibula y un disparo en la cabeza embarazada de cinco meses, ese feto se enterro vivo, a manos de un asesino, y disculpenme sino digo presunto, aun vivo que la ley española no juzgara porque asi esta establecido, porque el asesinato de mi tia Carmen ha prescrito. No me cuesta verbalizar estas palabras porque son la verdad, una verdad escuchada siempre la misma por parte de mi madre durante 36 años, una verdad llena de incertidumbre, con la que mi madre ha tenido que convivir y avanzar con disciplina, rectitud, responsabilidad , compromiso, siendo una mujer luchadora y ejemplar, sin tener ¡ni un solo ejemplo! ni recibir ninguna educacion de un nucleo familiar, ni cuidados, solo abandono y malos tratos, y a pesar de todo sola desde su niñez, su adolescencia y vida adulta, salir de donde estaba, estudiar, formarse, dirigir una empresa, criarme a mi, darme una educacion extraordinaria en el mejor colegio de Madrid de aquella epoca EL PILAR", el de la calle Castello, de ahi, del ejemplo de mi madre adquiero grandes e importantes valores que me acompañan en mi vida, la disciplina, la autoexigencia y la verdad. Yo no siento y nadie podra hacerlo nunca el dolor que ella vive, nadie podra sentir cada segundo, cada minuto, cada dia, cada semana, cada mes y año sin saber donde estaba su hermana, y encima vivir y no molestar, vivir sin culpar, sin poner excusas, sin caer en debilidades o adicciones, luchando contra la sociedad en muchos por no decir en todos los momentos siempre dura y cruel con la salud mental incluso a nivel institucional, tomarla siempre por loca, sentirse rechazada y aun asi avanzar, sola, digna, integra, humana, pero avanzar bien, con inteligencia con fuerza desgarradora y criarme a mi sola. Pienso muchas veces yo que soy educadora PEDAGOGA DE PROFESION, lo importante que es el ejemplo y la constancia para conseguir en los demas que se superen en sus carencias que crezcan de manera plena, que sean buenas personas y sepan convivir de manera necesaria respetuosa y honesta en sociedad, ¿ como mi madre ha podido vivir asi sin todo eso? ¿como? y encima encontrar a Carmen, lo he pensado muchas veces, solo el amor ha podido conseguir esto, el amor y la humildad, no hay otra explicacion, y lo he pensado muchas veces, su constancia, su disciplina, su lucha y su respeto hacia los demas y por las instituciones, impecable ciudadana del mundo y que a pesar de todo este dolor que viene de las entrañas, este dolor patologico y cronificado, este dolor provocado por otros, intentando hundirla sin sentido, sin compasion, este dolor que no la ha dejado vivir ni disfrutar de la vida, se lo han quitado todo, y aun asi siempre sonreir, ser educada, generosa, responsable, es capaz de alegrarle el dia a cualquiera, quien la conoce bien sabe de lo que hablo, es extremadamente inteligente y de eso y me vuelvo a repetir los que la conocen saben bien lo que digo y no, no esta loca, ha sobrevivido y sigue haciendolo en una sociedad hostil, nacida en una familia cruel, y con todo esto cumplio su promesa de encontrar a su hermana Carmen, fiel y constante "amor incondicional". No puedo expresar en dos minutos lo que siento por mi madre, ella es el ejemplo mas increible y humano que puedo tener, me siento orgullosa y agradecida por ello. Ella es una mujer maravillosa que la vida no la ha sonreido, no ha venido al mundo a ser feliz pero si a ser grande, yo solo deseo y lucho por ello, poder hacerle lo mas feliz que pueda el tiempo que siga viva, e intentar calmar su dolor con amor, porque yo si la quiero y aunque haya sido y es durisimo todo esto, todo lo vivido hasta encontrar a Carmen y tener que asumir que el asesino sigue vivo, que no sera juzgado porque el caso ha prescrito, y encima "asuman y no molesten", aun asi no cambiaria nada de mis 36 años al lado de mi madre.  

MAMA, SI ME VES EN TUS PENSAMIENTOS ABRAZAME PORQUE TE ECHO DE MENOS.


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