LLEVO UNA MASCARA...

No para ocultar lo que soy, si no para crear quien soy...
Demasiado perfecta para este mundo...
Porque hay personas que nos dejamos pisotear hasta que nos levantamos, y cuando llega ese momento, ese momento duro, triste, solitario, incomprensible para los asistentes al espectaculo, les hacemos comprender acompañando a nuestro resurgir de unos cuantos reveses, que ni somos, ni queremos, ni nos da la gana continuar siendo un tipo de producto desechable sin fecha de caducidad a lo que ellos pensaban que nos habiamos acostumbrado.
Yo soy una de esa niñas, ahora toda un mujer que a sus 60 años tiene, debe y va a poder ¡VOLVER A EMPEZAR!, porque ¡ESTOY VIVA!, porque me he cansado de ser mosca, porque he dejado de ser mosquito, porque ahora soy araña, porque ahora aunque sigo siendo comestible se camuflarme en los lugares mas yermos, donde si me pisan por casualidad o porque les apetece, van a salir tan escaldados que huiran como el gato huye del agua caliente...


¿Y COMO ACABA EL RESTO DEL CUENTO?.