PARA JOSEFA CON BESOS J. SABINA. HOLA Y ADIOS. ¿ ÚLTIMA GIRA?
Hola Joaquinito, de cerrado por derribo... ¡nada de nada!.
Yo no puedo regalarle ninguna cosa material porque no tengo nada, pero sí obsequiarle con mis pensamientos para que sepa si alguna vez lo lee, que no solo me ha dado la vida con sus canciones durante tantos años, esa que ahora deseo que al igual que yo la continúe luchando porque los inmortales es lo que hacen con toda su alma.
¡Adelante D, Joaquín!, ¡siempre adelante!.
Ha recorrido miles de millas, ahora se que desea seguir haciéndolo, y aunque se le pasa por la cabeza vivir una nueva vida, descansar, retirarse, por favor no lo haga, coja mi mano y yo le ayudaré a correr una maratón.
Apoyo, respeto, lealtad y amor incondicional sé que tiene a la vida, y quiero que sepa que todo eso me lo ha inculcado con sus canciones, aparte de fortaleza para seguir viva.
Hoy le digo ¡HOLA JOAQUINITO! con su permiso, hoy de mi boca no va a salir la palabra ¡ADIÓS!, y no lo va a hacer ya que es demasiado pequeña para quién es tan grande como usted, hoy lo que si deseo si me lo acepta es devolverle toda la fuerza que ha generado en mi para que continúe creando esperanza.
Ojala las personas se comportaran como las plantas, que te dan lo mejor de ellas y desechan lo peor.
Para mi esto que dice que es su última gira, para mi no lo es, para mi es sencillamente un concierto muy grande, y en definitiva un " CONCIERTO INACABADO", en el que me imagino que simplemente va usted a ir a beber un poco de agua para seguir y le recomendaron no hacerlo.
Sin su clarividencia y cordura, esas que únicamente se les concede a los elegidos, esas que derrocharon verdades en abundancia, a mi me enseñaron que se podían vivir 19 días como si fueran 500 noches, y aquí estoy esperando a que sean muchas más para continuar siendo una de sus floristas que en algún momento de su vida lleguen a cruzarse en su camino, saludarle y compartir con usted un beso con sal en la mejilla, poder bailar un tango junto con su pasado y el mío, donde su cuello siga siendo una rama donde colgarme y donde sus ojos sean dos gatos corriendo por los tejados, junto a ese pelo negro, ese pelo negro de los pecados.
Hombre y señor , que cada hora cambia de piel, golfo y decente, dulce serpiente de cascabel, que mi falda siga siendo la más corta de Chamberí, y mi cama siga siendo una cama para no dormir, que mi risa siga siendo una lágrima equivocada, que mis besos sigan siendo besos con sal.
Ojala hoy en el mundo que nos movemos, sin esperanza alguna me dejaran hacer horas extraordinarias, por el simple echo de incordiar.
Usted, siempre dirá ¿ que se debe?, jamás se le pasará por la cabeza irse sin pagar de ningún lugar, donde sabe muy bien que quizás y solo quizás alguien se permitiría trepar por su ventana, eso si, sin antifaz, ya que usted siempre ha tenido claro que dar la cara hay que darla aunque te la terminen partiendo.
Sueña de noche, duerme de día, es por eso que ahora es cuando usted tiene que estar más vivo.
Continúe, no nos deje, porque no quiero que nadie más que usted me cuente el cuento de nunca jamás, porque no me imagino siendo un pez en un whisky onderroz, porque aunque me sigua dejando la miel en los labios no me importa ya que le juro que para mal o para bien, sé que siempre recogerá los dos besos de una mujer que le tire uno por cada mejilla desde donde sea, como sea y sin discriminar a quién se los ofrezca.
Porque jamás fue usted ni será el fantoche de una noche, tiene usted Joaquinito demasiada clase.
Soy junto a otras millones de mujeres más (aunque hablo por mi solamente), las que hemos tenido la suerte de tener a quién nos ha defendido y respetado aún sabiendo que nuestro más grave y peculiar defecto no era otro que tener la frente muy alta, la lengua muy larga y la falda muy corta, y eso lo comprendió usted muy bien sin preguntar, porque siempre supo que era para nosotras nuestra única y simple supervivencia.
Usted nunca tendrá que regresar, no vamos a consentir que se vayas porque siempre estará en nuestros corazones cuando escuchemos sus poemas convertidos en letras, eso sí muy exclusivas para personas muy desiguales.
¿ Que vamos a hacer sin usted los chicos y las chicas, los señores y las señoras de ojos verdes color de la marihuana y las "MARIQUITAS PEREZ"?.
Gracias a sus letras convertidas en melodías hemos podido tener nuestros 20 minutos de fama.
¿Al infierno se va por atajos, jeringas y recetas?...al infierno no se llega jamás si personas como usted nos alivian el alma advirtiéndonos del peligro, unas almas que nos hubieran sido arrebatada si no hubiera existido ya que fue usted quien nos hizo visibles, reales, humanos, dentro de una sociedad llena de caníbales impunes.
Pero por muy canalla (como usted se define o le definen) que sea, para mi D. Joaquín siempre será un canalla elegantemente impertinente, incomodo para algunos, ¿cabrón con mayúsculas?, pero nunca un chulo de playa.
"CHICAS BARBIES SUPERSTAR", también escribió sobre ellas y las que solo fuimos unas chonis poligoneras, usted nos convirtió en diosas de su particular y maravilloso olimpo creativo.
Si a media noche por la carretera, detrás de una gasolinera unas luces rojas y amarillas te hacen un guiño, párate y frena, y si la Magdalena te pide un trago, tu la invitas a cien que yo los pago....
Un caballero Sabina que nunca presumió de estilo pero si de principios, porque total todos tenemos un alma que perder entre curvas redentoras, donde derrapar es muy sencillo.
Veinte años de príncipes azules, que se marchaban antes de llegar, de urgencias, disimulos y rutinas, veinte años de mitos mal curados, veinte años dibujando DIEGUITOS Y MAFALDAS, seguramente deseosos o deseosas de que usted les hubiera subido en algún momento de su vida la pollera.
¡QUE VIVA LA CALLE TIRSO DE MOLINA, ANTÓN MARTIN, EL RASTRO, Y EL ATLÉTICO DE MADRID!, porque cuatro cosas hay en Madrid que brillan más que el sol, ¡EL MERCADO DE MARAVILLAS, LA PLAZA DE CEDACEROS, LA TABERNA SAN MIGUEL Y SABINA!..
Te juro Joaquinito que las modistillas de Madrid te coserán de mil amores ese siete que tienes en el corazón, sin prisa, que ya se yo que las misas de réquiem no son de tu agrado, que el cura que ha de darte la extremaunción no es ni siquiera monaguillo, que tu traje de madera, que ve tú a saber cuando estrenaras, ni siquiera está plantado.
Cada vez que tengo que levantarme sin ganas, recuerdo esa frase suya que hace que me ponga las zapatillas, esa que dice que "HAY BESOS QUE RESUCITAN A UN MUERTO", pues si ese día va a ser el día que me lo den, solo eso me hace seguir respirando, pues usted lo mismo.
No le dé nunca una alegría de esas características a nadie, y mientras tanto continúe procurando que Dios no sea su abogado de oficio, porque su lugar no está donde habita el olvido.
HOY LE DIGO ¡HOLA! NUNCA ¡ADIOS! NO LO HAGA USTED TAMPOCO, EN TODO CASO DON JOAQUÍN....
¡¡¡¡HASTA MAS VER!!!