SI ERES CAPAZ DE RECORDAR CADA MOMENTO VIVIDO CONMIGO, ENTONCES REGRESARÉ.

Y lo haré, si, lo haré con una verdad escondida que nunca te dije cuando vivía porque apenas me llamabas, porque apenas me escuchabas porque apenas tenías tiempo para darte cuenta que existía.

Fue por eso por lo que me extinguí, para dejar espacio a un nuevo gilipollas, ya que observé que yéndome yo y ocupando mi lugar otro el mundo continuaría existiendo, porque ya no caven tantos.

Porque ni tantas sonrisas fingidas me han dolido tanto como la mía propia, hoy me continúa dando igual que hablen mal de mi, ya que no saben que soy mucho peor que lo que dicen.

A mi en particular siempre me han importado las personas que me aportan no a las que importo, ya que a aquellas a  las que importo es solo por interés, curiosidad o simplemente rareza, y para eso ya tienen material suficiente con intentar averiguar si existen o no los extraterrestres, de como son y como  es que se les ha ocurrido venir a visitar a sus primos por parte de madre.

El sufrimiento, palabra interesante, el sufrimiento, ese ni bien ni mal llamado estado de ánimo que es lo único que nos regala la vida de por vida, y si por un casual nos topamos con una ráfaga de felicidad, no nos hagamos muchas ilusiones porque será por un breve espacio de tiempo, un breve espacio de tiempo que nos devolverá a la pena y al padecimiento.

Vivir sufriendo, eso es lo que el mal llamado ser humano hace durante todos los días de su vida, por esa razón no dejaré que mi avatar sobreviva, y no lo haré porque el mundo se ha convertido en un gigantesco psiquiátrico y no es mi intención ver como lo cazan, lo encierran y lo atan de manos y pies a una cama de hospital con correas de cuero, eso sí anestesiado previamente vaya a  ser que por un casual cuando despierte eche a correr sumido en un miedo extremo.

Hoy vuelvo a continuar viva por desgracia, jamás me dejaron coger el camino fácil, donde podía decir lo que veía, donde podía decir lo que escuchaba, donde podía compartir con los demás lo que sentía sin miedo a represalias de mis convivientes.

Fue entonces cuando comprendí que solo me quedaba la escritura, incluso salvando parte de mi memoria, no conseguía  dormir cuando cerraba los ojos pero me aferré a ella porque los recuerdos me torturaban y aún escribiendo lo siguen haciendo, y lo siguen haciendo porque "ELLA" había muerto, porque "ELLA" había muerto, pero había muerto como una persona.

En mi historia, historia rescatada de la guardiana de mi memoria, no todos los cuerpos tienen sepultura, en mi historia no hay principio ni fin, porque en mi historia la palabra dictadura se repite una y otra vez aunque intente descartarla, ya que no hay otra manera de definir tan brutal régimen político.

PORQUE NO HAY DICTADURA MÁS PERFECTA QUE LA QUE VOTAN LOS CIUDADANOS.

PD.YO HE VENCIDO, Y LO HE HECHO PORQUE SIEMPRE ME HE NEGADO A MORIR POR DIOS, POR LA PATRIA, POR EL REY.