AUNQUE NO ME VEAS

Que útiles son las cosas inútiles, como esos que dicen que por el mar corre la liebre y por el monte la sardina.

Porque mientras haya peces en el mar nadando, porque mientras el sol continúe obsequiándonos cada día con su luz, con su calor, porque mientras siga brillando cada amanecer y la tierra gire alrededor de él, la vida en el planeta no se extinguirá.

Y mientras eso sucede, mi cabeza no deja de pensar en encontrar una razón por la que alargar mi existencia y darme una oportunidad más, intentando esquivar entretanto a la "señora de la confusión", esa que pretende una y otra vez convencerme a mi y a mi ya maltrecha conciencia de que estoy de acuerdo con ella intentándolo insistentemente, para hacerla entender de que nada de aquello que me proponga me interesará.

Porque si hay belleza en todas las cosas, tal vez la muerte sea una de ellas, aun así querida hermana y jamás olvidada Carmen mi amor por ti nunca languidecerá, no, no como lo hacen las flores muertas que poco a poco se han ido consumiendo en tu nicho desnudo, un nicho custodiado por el ángel de la muerte, que aunque parezca que solo es uno ¡no es así!, son dos hermana, porque "el uno" sin el otro no podrían volar hasta vosotras cada día para protegeros...

AUNQUE LAS ALAS DE UNO DE ELLOS SEAN SUAVES COMO GARRAS DE CUERVO.