jueves, 5 de abril de 2018

EL PRINCIPIO DEL FIN DE ALGO

No se puede castigar lo que no se puede perdonar.
Cuando se comete un crimen contra nosotros que ¿debemos hacer?, ¿recurrir a la fuerza?, ¿al ojo por ojo y diente por diente?, o por el contrario invocar a la humildad del amor.
Lo natural seria que nos decantaramos por "el amor", ya que si posees el suficiente dentro de ti podras dominar el mundo (o eso se dice), porque es una fuerza temible que nada la puede igualar, pero el ser humano es mas proclive a devolver un golpe que un favor, y yo por suerte o por desgracia me hallo en tierra de nadie, porque en mi la gratitud es una carga muy pesada, pero la practico, lo contrario que la venganza un plato que se convierte en todo un placer cuando se lo sirvo muy frio a todos esos que ni se imaginaban iban a estar sentados a mi mesa.
Porque soy de esos a los se les puede pisar, pero que cuando se levantan mas vale que corrais, porque no pago con la misma moneda, pago con dos, porque soy de los que si hay que esperar espero, y espero a aquellos que me maltrataron sencillamente para disfrutar viendo como con el tiempo se destruyen entre ellos, porque les he estado observando, porque me he mantenido callado , porque he aprendido de todas y cada una de mis equivocaciones, porque continuo sonriendo, porque hoy como cada mañana voy a volver a salir a la calle dominando el arte de la permanencia, hoy me voy a vestir discreta pero con un toque sexy, discreta para no dar el cante y con un toque sexy para dar por culo.
Porque total ¿que me puede pasar?, ¿que entre al corte ingles, pregunte por unos vaqueros que me gustan y me digan que se les ha agotado mi talla?...

Y PORQUE SOLO LA VENGANZA ES DULCE Y ADEMAS NO ENGORDA...


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