HUBIERA BEBIDO MAS CHAMPAN EN TUS ZAPATOS...

Pero llevabas plantillas.

Me hicieron pequeña y no me quedo otra que convertirme en gigante en un mundo asesino que me obligo a deshacerme de mi alma, requisito imprescindible para hacerme invisible en "EL", para pasar desapercibida, para que mi sombra y solo ella hiciera el trabajo sucio mientras incordiaba incluso en las noches mas oscuras cuando paseaba libremente al cobijo de la luz de las farolas, farolas que exclusivamente regalaban su luz en las estrechas aceras sin atreverse a iluminar los oscuros callejones donde se consumaban atroces crimenes y violaciones bestiales con el unico pago de la sangre de las confiadas presas.

Ella y solo ella mientras esperaba apoyaba su negra silueta en el borde de la esquina del paso de la tenebrosa calle sin salida, se recreaba en observar la escena, para pasar el tiempo, un tiempo para ella escaso y demasiado eterno para las victimas, y en jugar a hacerse aun mas pequeña para no acojonar a quien una vez cometido su delito al pasar delante de ella la ignorase, mientras limpiaba sus manos empapadas en sangre con los restos del champan que le habia sobrado, a la vez que las secaba con un pañuelo blanco y asi no ensuciar la botella que no pudo acabar de beberse con ellas, porque un "DESTRIPADOR" de la noche no deja huellas, porque un "DESTRIPADOR" de la noche, se termina el champan que queda en la botella lleve o no lleve su presa...

PLANTILLAS.